No me diréis que darse un capricho de vez en cuando no te pone contentín.
El último que me he permitido yo ha sido la suscripción a la revista Diseño Interior. Me encanta. Es una publicación mensual y procuro que su lectura me dure esos 30 días aproximadamente, con lo cual, a veces, más que hojearla me la estudio. En el número de Enero he descubierto al diseñador de zapatos Kovi Levi. Es la bomba. Su calzado destila buen humor por todos lados.
Así que me da por pensar y deduzco que: queramos o no, conscientes o no, con toda la intención del mundo o no; una parte de lo que somos queda impreso en lo que hacemos. Ponemos el corazón en cada acto que llevamos acabo y nuestro estado de ánimo se refleja en lo que ejecutamos. El trabajo que realizamos, los correos que enviamos, las conversaciones que tenemos, todo evidencia nuestra forma de encarar la vida. Con alegría, positivismo, energía; o no. Entonces medita: ¿qué legado deseas dejar grabado en tus obras?
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