lunes, 19 de noviembre de 2012

Poniendo fin a lo ya iniciado

Uno de los consejos que suelen dar, aquellos expertos en felicidad, para alcanzar más cantidad de alegría es: “Acaba lo que empezaste”.
Pues bien, hoy llego aquí sin tener ni idea del resultado de llevar a cabo tamaña proeza. Y además lo digo así, a las claras, sin ningún tipo de tapujo: no suelo terminar nada de lo que comienzo.
Tengo una falda hilvanada desde hace tres años, que cuando quiera ponerme con ella seguro que ya no será ni de mi talla.
Tengo la estructura de una alfombra montada desde hace un año, que cada vez que la miro se me cae el alma a los pies, pues temo no poder llegar a estrenarla nunca.
Tengo un método para aprender francés desde hace dos años y aún no he pasado de la lección número 5.
Todo lo acometo con mucho interés pero si no obtengo resultados en 3 días lo abandono.  
Necesito remediar esta costumbre. Así que la próxima vez que nos veamos no os asustéis si me veis con una boina ladeada y diciéndoos: Bonujour. Comment ça va?

No hay comentarios: